En España debemos muchos euros, no se cuantos pero muchos, pero somos el Paraíso Terrenal. Tenemos dos cosechas al año, alimentos de primerísima calidad, casas de lujo y hoteles, comercio por tierra y mar, osea que somos inmensamente ricos realmente, porque los euros y el oro son símbolos que podemos sustituirlos o podemos destruirlos directamente y en España viviríamos divínamente o tan panchamente…no podrían decir lo mismo los rusos o los chinos o los árabes o los americanos de USA……Es por lo tanto normal que los que tienen dinero y son listos inviertan en España, como hace Bil Gates o muchos banqueros y es que los dólares puede llegar un momento que no sirvan ni para papel higenico o los euros y es que donde esté una maravillosa mansión con piscina o una casita con su jardín y su barbacoa que se quite el oro, que al fin y al cabo ese te lo roban fácilmente y no se disfruta.
El problema que tiene España y no podría ser de otra manera, son los políticos que siempre se pelean por el reparto del pastel y que se quejan de que otros les roban, porque piensa el ladrón que todos son de su condición. Osea que no es España la que que roba a Artur Mas o a Felip Puig o a Jordi Pujol, sino que son los políticos los que roban a España y concretamente me roban a mi mis derechos y por eso se ha desatado una terrible maldición y mientras que no se restituyan mis derechos y me devuelvan lo que me han ROBADO, que no habrá perdón.
Ya hace dos años avisé que una terrible MALDICIÓN se había desatado en Cataluña y que afectaba a España y al Mundo y que era la Virgen de Mongrony que había Maldecido a Jordi Pujol y que ello era a causa de que habían desafiado a Guifredo el Peloso, a los Santos y a los Mártires y habían tratado de especular urbanísticamente con el lugar más sagrado de España, que es mi pueblo natal y me habían echado a punta de escopeta, con tres niños pequeños, con una orden judicial falsa y después que mi tío que era un santo apareciera con el cuello roto.
El Paraíso Terrenal o la Hesperia-España será pués un infierno hasta que no sea beatificado mi santo tío Jaime Niubó, que murió martirir de la corrupción urbanística y me sean restituidos mis bienes con intereses, tal como está escrito en los textos antiguos o sino que se atengan a las consecuencias, que sean apartados de las Hileras de los Santos y ajenos al Consorcio Divino o que se los trague vivos la tierra como a Datán y Abirón…
.La maldición de los templarios de Ripoll se ha desatado en España